Las máquinas registradoras fiscales e impresoras fiscales son la primera solución de seguridad. Han estado disponibles durante mucho tiempo. La solución protege físicamente la memoria de datos del acceso. La memoria fiscal está firmemente adherido a la carcasa y está sellado con resina epoxi. Para que este tipo de sistema sea seguro, toda la máquina registradora fiscal y la impresora fiscal debe estar sellada y tanto el hardware cómo el software deben estar certificados por la administración tributaria.
Dependiendo de los requisitos, las especificaciones técnicas del almacenamiento de datos fiscales varía en cada país, pero generalmente tienen en común lo siguiente: